Antes que nada, que conste que le tenemos un gran aprecio al amigo Fernando Herrera de Roastbrief pero que conste también que él no es un hombre ni de publicidad ni de marketing. Alguien que tiene en su empresa infinidad de becarios, que tiro por viaje se equivocan y por eso la información de ese sitio es tan intrascendente.
Y apoyado en tan semejantes mentiras nuestro otro amigo Raúl Cardós, de anónimo comentó que, en su edición 2020, el Círculo de Oro premió al 50% de los trabajos inscritos, lo cual es falso desde luego. Conforme a números manejados por el propio Círculo Creativo este año se premió al 35% de las inscripciones… que sí fueron muchos porque, en años pasados, se manejó entre el 25 y el 30%.
Y surge un primer axioma, que debe aplicarse ante todo: el Círculo vive de eso. Si se tiene dinero incluso para enviar a los Jóvenes Creativos a Cannes y para muchas otras cosas, es gracias a esas inscripciones.
Al respecto, Héctor Fernández, director general de VMLY&R, la agencia ganadora del Círculo 2020, nos dice: “si hay inquietudes, críticas y otros señalamientos hay que oírlos porque la polémica nos enriquece. Todo es perfectible. Pero lo cierto, hoy en día, es que el trabajo del Círculo es el mejor de México y participando en él se aprende mucho. Y la gente talentosa se da a conocer. En ningún festival del mundo la gente está al 100% de acuerdo con lo premiado. Pero de eso se trata. Y de que lo discutamos. Porque, insisto, la libertad económica de la que ahora goza el Círculo Creativo de México, esa que le permitió traer a México conferenciantes de primer nivel en enero pasado y que ha provocado que ahora haya hasta fila de pretendientes a su presidencia, solo se logra con las inscripciones”.