La quiebra de Televisa no es de hoy: empezó hace muchos años cuando, aplicando el criterio de que “la gente se traga todo”, la dirección de esa empresa permitió que la calidad de sus contenidos se desplomara a nivel del piso. Y así, durante años, Emilio Azcárraga y su gente se defendieron del fracaso argumentando que ellos seguían teniendo el mismo rating… solo que en menos aparatos. La gente simple y sencillamente apagó su televisor y a otra cosa mariposa, lo que explica en parte el éxito de las redes sociales.
En poca palabras, en México la tele abierta, (porque TV Azteca anda por las mismas), mató a la audiencia y ya nunca pudo revivirla. Y para muestra basta un botón: el programa HOY que pasa todos los días, de 9 a 13 hrs., en el otrora Canal de las Estrellas (el 2) con una programación y unos sketches que mas bien parecen creados por retrasados.
A los pocos minutos de ver tantas mamarrachadas cae uno en cuenta por qué la gente mejor le cambia. Y ahí, como si nada, diciendo y haciendo puras tonterías la vedete Galilea Montijo a quien, insistimos, Anabel Hernández menciona en su libro “Emma y las otras señoras del narco”, en sus relaciones con los narcos de este país.
Ojo: hay que leer libros así para darse cuenta la clase de pérfidos y malvados que son, en este país, quienes se dedican al trasiego de la droga… ¡es una historia de terror! Una historia negra con cuyos personajes, a quienes todos les huyen, sorprende que sean sus clientas e incluso sus amantes, actrices y encueratrices como la propia Galiela Montijo o Ninel Conde, sobre todo ésta última, que ha hecho transas y barbaridades aprovechando la notoriedad que a muchos capos y políticos, (como a Manlio Fabio Beltrones) parece ejercer en ellos efectos afrodisiacos.
En el libro de marras, Doña Ninel es descrita como lo que empeñó el diablo: y todo con pruebas incluso escritas. Podríamos, si ese fuera nuestro giro, explayarnos lindo y bonito en el asunto y dejar a nuestros lectores con el ojo cuadrado, pero ese no es nuestro propósito. Al respecto, recomendamos a los interesados en el tema a leer la obra en cuestión: su autora, Anabel Hernández es una periodista seria y de prestigio, que ha ganado infinidad de premios por su labor, incluso hasta la Legión Francesa.
Y ello se aprecia desde el primer capítulo, en el que entrevista a Emma Coronel Aispuro: todas las fuentes han sido comprobadas como se debe.
De ahí que, viendo tanto escándalo, cabe deducir dos cosas:
- A Televisa ya le valía madres la empresa y descuidó su producto hasta la infamia.
- Es de esperarse que Univisión, el nuevo propietario de Televisa a partir del 01/01/22 meta orden. Porque en EU escándalos como los que a diario protagonizan las señores Conde, Montijo y compañía, mas que mal vistos, son hasta perseguidos por la ley. La policía de EU no puede darse el lujo de tolerar que el crimen se exhiba impunemente en sus pantallas chicas.
Ahora sí que estamos atentos. Se trata de una excelente oportunidad, para Univisión, para deshacerse de la bola de indeseables que le deja la anterior administración.
